Después de la dilación y la paranoia
Si Grecia está roto, España puede estar muy lejos? Más de cuatro veces más grande que Grecia, España ha recibido casi como una atención no deseada tanto por los inversores. Este mes, la bolsa de valores de Madrid ha caído y la prima de riesgo de los bonos de España ha aumentado (ver artículo). Ayudantes de José Luis Rodríguez Zapatero, el primer ministro socialista, la afirmación de que España es víctima no sólo de un ataque especulativo, sino también de un complot dirigido por "la prensa anglosajona" para destruir el euro.
Con este disparate la mejor respuesta es: crecer. Es cierto que España no es Grecia. Su deuda pública, en relación con el tamaño de la economía, es menor que el de Gran Bretaña o los Estados Unidos. No ha tenido que rescatar a sus bancos. Y los temores de contagio financiero han hecho que los mercados no natural volátil. Pero hay buenas razones para preocuparse por los inversores a España. Tiene la mayor tasa de desempleo en Europa, el 19,5%; una economía sigue en recesión, que no crecerá considerablemente hasta el próximo año, y un déficit fiscal que aumentó a 11,4% del PIB el año pasado, como la recesión redujo los ingresos fiscales y forzado hacia arriba el gasto en los desempleados. Sin un retorno más rápido al crecimiento, la deuda pública se convertirá rápidamente en insostenible.
Para empeorar las cosas, Zapatero se ve fuera de su profundidad. Era un líder popular en los buenos tiempos, durante el largo auge de España. Pero él no pudo ver la crisis que viene. Cuando tardíamente reconocido que la economía estaba en problemas, se diagnostica el problema como una recesión importados que se podía esperar a cabo de manera segura. Siguió repartiendo dinero público y el aumento de las pensiones y los salarios del sector público y rehuir a la reforma. Durante el mes pasado, los mercados han entendido que este curso, si persiste en ello, llevaría a la ruina. Son un paso por delante del gobierno, que ha reaccionado con torpeza confusión, de repente el lanzamiento de un plan de austeridad y un esquema de vagos para la reforma del mercado de trabajo, sólo para retirar restos de ambos en la primera pío de la protesta.
Muchos de los problemas de España empieza en casa. El auge se basó en una burbuja de la vivienda, y en las bajas tasas de interés que venía con el euro. Crecimiento ahora tendrá que venir de la inversión en otras partes de la economía y de las exportaciones. Sin embargo, en relación con el resto de Europa, España se ha convertido en un alto costo, la economía de baja productividad. De indexación de los salarios ha hecho que las empresas no competitivas. Acuerdos de cese Generoso desaniman a las empresas la contratación de trabajadores y han creado un mercado de dos niveles de trabajo y el desempleo masivo. Años de comprar a los gobiernos regionales con dinero en efectivo y la transferencia exagerado decir que el gobierno central ahora controla directamente sólo una quinta parte del gasto, mientras que las empresas deben superar las sierras de la regulación se superponen.
Un pacto nacional para la reforma y el crecimiento
La recuperación del crecimiento y reunir el compromiso de empezar a recortar el déficit una vez que se reanude la economía tomará más de una decisión ejecutiva. Para reformar el mercado laboral, la economía y el gasto público, España debe tener una hoja del libro de Alemania-o incluso de su propia transición a la democracia en la década de 1970 con un pacto nacional con la participación de los sindicatos, las empresas y todas las partes principales.Un anterior primer ministro socialista, Felipe González, era capaz de gobernar tal. Pero el señor Zapatero sólo ha ofrecido soluciones tácticas para aplacar a los sindicatos, los barones regionales-y ahora el mercado de bonos. Él tiene sólo unos pocos meses para demostrar que él puede tomar las decisiones radicales que se necesitan para prevenir años de estancamiento, lo que podría desencadenar el desorden social que teme. Retrasar el dolor sólo lo aumentará. Si no puede encontrar en sí mismo para empezar a líderes, muchos en su propio partido, así como españoles de a pie puede preguntarse antes por qué está en el Palacio de la Moncloa.
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